sábado, 18 de diciembre de 2010

Domingo de Lluvia

En la calle llueve y usted está parado en la puerta de su casa esperando a que el cigarro termine de consumirse entre sus labios. Está pensando adónde irá precisamente.
Hoy es domingo, y los domingos son culpables de la soledad de las veredas.
Usted tiene un paraguas en una de sus manos,  es un paragua negro que, plegado, tiene algo de pájaro siniestro.
Usted abre el paragua sin preocuparse de sacudirlo varias veces antes de hacerlo. Y entonces es usted responsable de todos los recuerdos que caen sobre su cabeza.
Usted empieza a caminar bajo el paragua y siente que es demasiado grande. La misma sensación de arquitecturas abandonadas sobreviene al contemplar el asiento vacío del auto, o al mirar la mitad de la cama desierta, inútilmente grande. Esa soledad de las camas donde crecen con tanta fertilidad los hongos del olvido.
Más allá del paragua cae la lluvia y, bajo el paragua, llueve también húmedas reminiscencias de otros días que le hacen a uno sentirse culpable por no haber tomado las precauciones necesarias.
Usted sigue caminando bajo el paraguas. Lo cambia de mano, realiza todos los trucos inútiles del hombre solo al comienzo de un domingo, trata de convencerse de que lo ocupa todo, de que nada ni nadie falta bajo la tela negra. Pero sus tretas sólo aumenta su soledad de caminante dominguero.
Usted siente entonces el eco de sus pasos. Ese timbal urdidor de rumbos forzados, látigo de galeote o redoble de tamborcitos de látigo de galeote o redoble de tamborcitos de hojalata que conduce al guiñol hasta la guillotina. Usted siente entonces unas ganas irrefrenables de llorar, y naturalmente puede hacerlo.
Bastará con que baje el paragua hasta que la perspectiva reluciente de la calle se borre en el presente de tela negra que bloqueará sus ojos y no vea nada más que el juego de varilla, esas costillas plateadas de murciélago matinal, y, si piensa que alguien puede verlo, bastará con que cierre directamente el paragua con su cabeza metida entre las varillas, como si estuviera comprobando la perfección del mecanismo mientras la lluvia cae sobre sus hombros, que a ratos se estremecen, y sus lágrimas se confunden con la humedad de la tela.

domingo, 12 de diciembre de 2010

Verdad o Mentira??

Lo escribi un dia en clase de Biología cuando estaba aburrida!

Reflexionando ....... en realidad cuesta que te crean cuando dices la verdad, las personas mas cercanas s dan cuenta si es verdad o mentira, cuando otros creen en lo que dices... :S  Decir mentiras sabiendo que es malo mentir, pero en algunos casos te salvan jejejjeje,  algunos momentos es mejor una verdad que te lastime y que duela una vez a que una mentira te destruya cada vez que te lo recuerdan ....... prefiero que me hagas LLORAR con la verdad a que me hagas FELIZ con una mentira ..... : / 

viernes, 3 de diciembre de 2010

Mi signo del zodiaco


1996


 La Rata: Animal valiente, inteligente, sobrio y provisto de recursos. Posee gran astucia, es ágil y se las ingenia para encontrar siempre una albergue abundante para sus necesidades. Es saludable y prudente. Se dice que la Rata encuentra sus alimentos sólo en los lugares donde hay prosperidad y riqueza, de modo que donde quiera que este animal establezca su morada habrá abundancia. Su principal cualidad es la intuición, la astucia y la osadía. Poseen una gran creatividad y una impresionante capacidad de invención. Ante los grandes obstáculos, se diría que parecen achicarse; no obstante, esa detención en la que se mantienen por espacio de unos minutos, les sirve para planear el ataque más eficaz. Porque también cuentan con un espíritu aventurero y son las personas más seductoras del Horóscopo Chino. Si alguien se atreve a enfurecerlas se enfurecen rápidamente y contraatacan con evidente fiereza . Pueden resultar bastante celosas en el amor y, sobre todo, en las cuestiones sexuales. Viven intensamente el presente, y cualquier acontecimiento que se presenta se transforma en el acto en un motivo capaz de hacerlas luchar hasta resolverlo. Prefieren vivir de su ingenio que del trabajo práctico. El dinero les quema en las manos; sin embargo, no lo derrochan. Sienten una tendencia especial a lo intelectual, son sentimentales y muy generosas con las personas que aman. Son compatibles con casi todos los animales del Horóscopo Chino, excepto del caballo.